Marta Nutrición

Lasaña de soja texturizada

Si me sigues en las redes sociales, sabrás que mis hijos no aceptan muy bien los alimentos nuevos, pero al ser nutricionista, es inevitable tener todo tipo e ingredientes en mi cocina con la idea de recomendarlos a mis pacientes.

Antes que nada, quiero hablarte de la soja texturizada:

Como sabes, la soja es una legumbre con una proporción bastante alta de proteínas, fibra y carbohidratos muy interesante y recomendable para incluirla en nuestros planes semanales.

Una buena opción es consumirla en forma de soja texturizada, que se obtiene a base del residuo que queda una vez que se han desgrasado y deshidratado las habas, este residuo después se somete a un proceso de extrusión (se aplican altas temperaturas y presión) que dan como resultado unos gránulos marrones de forma irregular y muy ligeros. 

¿Dónde la puedes comprar?

La puedes encontrar en casi todos los supermercados o en tiendas ecológicas y herbolarios a un precio que ronda los 2-3 €/250g.

¿La puede comer mi hijo/a?

Se puede introducir igual que cualquier otro alimento a partir de los seis meses de edad siguiendo la regla de los tres días.

¿Cuál es mi experiencia con la soja texturizada?

Siguiendo con mi rutina de probar todos los productos alimentarios que salen en el mercado, decidí un día, comprar soja texturizada para hacer recetas sin carne para mis pacientes vegetarianos o para incluirlas en los menús semanales y así reducir la carga de proteínas de origen animal, y se me ocurrió probar de hacer una boloñesa con la soja, el caso es que como era de esperar, no fue aceptada por mis hijos y dejé el resto de la soja en un bote de cristal y la guardé.

No fue hasta hace bien poco, que decidí darle otra oportunidad y pensé hacer una lasaña (que les chifla a mis hijos) de la misma manera que la hago con carne, pero con la soja que me sobró, para esta receta trituré un poco la soja para hacer los gránulos más pequeños y en vez de hidratarla con agua fría y salsa de soja, decidí hacerlo sólo con agua fría.

Y el resultado no pudo ser mejor, ¡ambos repitieron! así que te dejo la misma receta que hice para que la puedas replicar con tu familia, ¡espero que os guste!

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Scroll al inicio